¿Cuáles son los tres grandes retos a los que te puedes enfrentar en lo referente a la gestión de los conductores?

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No siempre resulta sencilla la tarea de gestionar a los conductores de una empresa de transporte, ya sea por los empleados o por los vehículos. De hecho, gestionar a los conductores es un quebradero de cabeza para muchas empresas y es algo que puede afectar a la optimización de la flota. Por ello, es preciso destacar cuáles son los tres grandes retos a los que se enfrentan las empresas de gestión de flotas en este sentido.

¿Cómo se consigue gestionar a los conductores de una empresa de transportes?

La gestión óptima de conductores es algo que debe cuidarse, puesto que puede afectar de manera positiva o negativa a la productividad en la empresa. Por esta razón, es preciso que haya una estructura clara y, sobre todo, una política adecuada de comunicación entre todas las partes. En cualquier caso, destacamos los tres grandes retos que tienen por delante las compañías de transporte para lograr que su gestión sea óptima.

 

Cumplimiento de las normativas

Un gestor de flotas debe estar pendiente de todos los cambios que se produzcan en las normativas nacionales e internacionales. Esto es así, porque es necesario gestionar a los conductores de forma óptima. De este modo, brindará siempre información actualizada a los conductores para que cumplan con las horas de conducción y el tiempo de trabajo establecido. Hablamos de algo esencial, ya que no cumplir con dichas normas puede implicar sanciones importantes.

Además, ejecutar esta gestión de forma manual quita mucho tiempo e incrementa el riesgo de cometer un error al trabajar con tantos datos. Por ello, una buena solución es optar por un software de gestión de conductores que supervise los tiempos de conducción y los de descanso. Esto te dará información precisa y actualizada, lo que te permitirá ahorrar tiempo.

Seguridad en la carretera

La mayoría de los accidentes en carretera se producen por errores humanos, sobre todo por tener malos hábitos de conducción. Por esta razón, la estrategia de gestión del riesgo en la carretera cobra más importancia que nunca.

De hecho, podemos ayudar con dispositivos integrados en el vehículo y en la interfaz de conducción para proporcionar comentarios al momento. De este modo, sabremos cómo conducen nuestros empleados y podremos dar directrices para que mejoren o para que sigan con su estilo actual de conducción.

Además, es recomendable que implementemos mejoras con consejos sobre hábitos más ecológicos en la carretera, como un cambio de marchas más apropiado. Todo ello también repercutirá en un menor gasto de combustible y, por ende, en un mayor beneficio para la empresa.

Productividad

Aunque siempre sea algo que se puede mejorar, la productividad está en el punto de mira de muchas empresas, sobre todo con la competencia actual. Una buena forma de solventar la falta de productividad sería integrar datos telemáticos y un GPS en el sistema de gestión de conductores. Con ello tendríamos información en tiempo real sobre sus rutas y podríamos buscar alternativas para conseguir una mayor eficiencia de cara al futuro.

Con todo, estos tres retos muestran que gestionar a los conductores no es una tarea sencilla, pero se puede hacer. Y con ello seremos mucho más productivos.

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